jueves, 18 de junio de 2009

Tres mil quinientas cinco decisiones

Creamos este blog sin tener muy claro de qué hablaríamos. Sólo empezamos con la esperanza editorial de poder establecer una comunicación constante con los lectores y compradores de nuestros libros. Y así esperamos que suceda, claro. Pero como aún no publicamos ni tenemos libros a la venta -más adelante contaremos detalles de lo que viene-, la idea inicial quedó un poco en el aire. Entonces nos tuvimos que sentar nuevamente a masticar qué contendría este blog, si todavía no podemos mostrar material editado. Del mismo modo nos preguntamos de qué hablaríamos en momentos de calma editorial.

Así llegamos a esta brillante idea de Bitácora Editorial. Sí, es brillante para nosotros, para nuestras necesidades, para lo que pretendemos y buscamos como Quilombo Ediciones. La idea de este blog, entonces, es dar cuenta de distintos aspectos de nuestra labor editorial, incluso aquellos detalles cotidianos que aparentemente no tienen importancia ni relación alguna con los libros. En efecto, jugar con lo aparente será parte de nuestro blogeo.

Y aunque algunos opinen que es un riesgo comentar todo lo que sucede en nuestra oficina escondida en el bosque, también, y aquí el trasfondo de todo esto, creemos, como sucede a la larga en todos los trabajos, que son los detalles del día a día los que conforman el resultado final de cada una de las ideas que se llevan a cabo. Y ese es el contenido que pretendemos abrir y compartir: nuestro día a día, disperso, emotivo, trabajólico, pasivo, y tantas cosas más.

Este formato será nuestra forma de comunicarnos y hacer editorial. Sobre todo porque estamos comenzando y no nos conoce nadie, por lo mismo podemos darnos estos gustos y otros también.

Haciendo libros nos dimos cuenta que existen tres mil quinientas cinco decisiones, por si no son más, las que tenemos que ir tomando diariamente para avanzar. Dejando cosas de lado, solucionando problemas que no teníamos previstos, defendiendo ideas que parecían ganadas o dudando, cada cierto tiempo, si está bien o no que dediquemos nuestras vidas a la realización de libros ilustrados. Obviamente, para bien o para mal, todo ese trajín no se ve ni se verá reflejado a simple vista en cada libro que editemos, pero queremos ir construyendo nuestros procesos con las ventanas abiertas y vuestros comentarios. Matando de paso todos aquellos momentos que nos torturan porque creemos que jamás el libro llegará a imprenta, o que tal vez nadie lo comprará. Esta bitácora es la mejor manera que encontramos de estrangular la angustia y seguir, construir.

Queremos, dentro de lo posible y con la mayor sinceridad que podamos, ir contando todo lo que va aconteciendo en este quilombo.

6 comentarios:

jisa dijo...

Felicidades!!
Excelente sitio, excelente blog, excelente iniciativa.
Desde hoy, la vida es un Quilombo.

Unknown dijo...

Camila, desde el frío y lluvioso Sur de Chile, te mando mucha fuerza y ánimo para continuar con tu lindo proyecto. FELICITACIONES.
Me siento muy orgullosa de tus logros.
Te quiero mucho.
Carmen

vabra dijo...

Cami, felicitaciones por tamaño quilombo!!!
un abrazo
v

Unknown dijo...

Que quilombo!!!!!!!! esta re bueno...

María Elisa Quiaro dijo...

pues ya yo bailo catála, hora buena, sole del sur

María Elisa Quiaro dijo...

pues ya yo bailo catála, hora buena, sole del sur